viernes, 15 de agosto de 2014

Discrepar con el envase, aprobar el contenido


por Hugo Bruschi en el Año de la Dignidad

Como bien sabemos todos, el primer contacto del cliente con el producto, es visual, de ahí la importancia de su presentación. Formas, colores y hasta un uso posterior del mismo una vez consumido,juegan un papel muy importante al momento de la elección. Está demostrado que el consumidor se dirigirá hacia aquel producto, que reúna estas características presentadas de forma original. En un escaparate de similares, triunfará a ojos del cliente aquel que presente su mejor forma. Desde un condón hasta un cepillo de dientes, desde un automóvil hasta el dulce de leche, las ventas se manejan a partir de esta premisa: Su presentación.

El mundo político que también tiene un producto a vender, es consciente de esta regla de oro, de ahí la necesidad de presentar el envase de la mejor forma posible para satisfacción de los clientes. El contenido de los programas, así como la carne utilizada en las hamburguesas congeladas, poco importan. La gente no vota por programas ni entra a Mc.Donalds por hambre. En uno y en otro caso, juegan factores al momento de tomar las decisiones. Y como en política también la oferta es grande, los fabricantes también deberán ser muy cuidadosos a la hora de presentar sus productos. Cuantas veces hemos visto, que aún los llamados "tradicionales", aquellos que ya están impuestos en la aceptación de la gente, han tenido que renovar el mensaje, cambiar el envoltorio, etc. para aumentar las ventas? También están o mejor dicho estaban aquellos que creyeron en el éxito permanente. Se durmieron y los arrastró la corriente. "Dame una gilé" decía la gente. A esa altura ya existían otras marcas de hojas de afeitar, que superaban las ya casi inexistentes Gillette. Todas afeitaban, pero seguramente algunas presentaron sus productos de tal modo, que las hicieron ganadoras.
Ahora se acerca un período en donde la imaginación, la sutileza, la lectura correcta de las expectativas populares pueden jugar un papel preponderante, a la hora del resultado final de las ventas. Y todos seguramente tratarán de presentar sus productos de la mejor forma posible, sin alterar el contenido claro está.

Los productos se presentarán al público en 2 grandes escaparates: uno a la izquierda del local y el otro a la derecha. Cámaras ocultas irán registrando cada movimiento, cada gesto, cada inclinación a tal o cual envase. Dentro de cada grupo, estarán también aquellos innovadores en materia de presentación, aquellos que acierten mostrar una imagen distinta y renovada del producto haciéndolo más tentador. Sobre este grupo recaerán las esperanzas de éxito, en esta gran exposición y venta de la industria nacional.